Consenso de los expertos internacionales sobre la seguridad, el uso y los beneficios de los edulcorantes bajos en calorías como sustitutos del azúcar
Los alimentos y bebidas que emplean edulcorantes bajos en calorías pueden incluirse en las pautas y recomendaciones dietéticas como alternativas a los productos con azúcar; los edulcorantes bajos en calorías son ingredientes seguros que presentan beneficios potenciales para el control del peso, de la glucosa para la diabetes y para la salud dental, si se usan en sustitución del azúcar. Estas son algunas de las conclusiones principales de un panel internacional formado por más de 60 expertos científicos que se reunieron los días 2-4 de julio de 2017 en un congreso en Lisboa organizado por la Fundación para la Investigación Nutricional (FIN) de España, en colaboración con la Universidade Lusófona de Lisboa, y con el apoyo de 43 organizaciones y fundaciones especializadas en nutrición y dietética, sociedades médicas, universidades y centros de investigación de Europa y Latinoamérica, incluida la Asociación Internacional de Edulcorantes (ISA). Las conclusiones de la reunión se recogieron en un documento de consenso publicado en junio de 2018.1 El objetivo del documento, como señala el profesor Lluís Serra-Majem, Catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública, Director del Instituto Universitario de Investigaciones Biomédicas y Sanitarias de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, y Presidente de la Fundación española para la Investigación Nutricional (FIN) en un Comunicado de Prensa 2, es: “proporcionar un punto de referencia útil y basado en evidencias que ayude en el esfuerzo por reducir el consumo de azúcares libres en línea con las actuales recomendaciones internacionales de salud pública ”.
Puntos destacados:
- La seguridad de los edulcorantes bajos en calorías ha sido revisada y confirmada por organismos regulatorios de salud pública de todo el mundo; de hecho, son algunos de los ingredientes sobre los que más pruebas se han realizado de toda la cadena alimentaria humana.
- El uso de edulcorantes bajos en calorías en lugar del azúcar pudiera ofrecer beneficios en el contexto de los programas de reducción de peso, para el control de la diabetes y para la salud dental.
- Se ha sugerido que los alimentos y bebidas a los que se añaden edulcorantes bajos en calorías se incluyan en las pautas dietéticas como alternativas a las versiones endulzadas con azúcar.
- Debe potenciarse la educación de los consumidores sobre los edulcorantes bajos en calorías de forma rigurosa y objetiva, basada en las mejores pruebas científicas y procesos regulatorios.
- Los profesionales de la salud son una importante fuente de información científica; la educación continua de este grupo sobre la ciencia que rodea los edulcorantes bajos en calorías es un aspecto necesario.
Conclusiones del congreso de Consenso Iberoamericano de Lisboa
Con el fin de proporcionar un punto de referencia útil y basado en pruebas fehacientes, y así colaborar en los esfuerzos por reducir el consumo de azúcar, siguiendo las actuales recomendaciones internacionales de salud pública, más de 60 científicos internacionales expertos en los ámbitos de la alimentación, la nutrición, la dietética, la endocrinología, la toxicología y la salud pública se reunieron en Lisboa para analizar y revisar las pruebas existentes en relación con el uso de edulcorantes bajos en calorías como sustitutos del azúcar. Entre los temas evaluados durante el congreso de Lisboa, y en un documento de consenso publicado posteriormente1 se incluyen: la seguridad y la regulación existente sobre los edulcorantes bajos en calorías, su impacto sobre el control del peso, de la glucosa y para la salud dental, su función en la reducción del consumo de azúcar y en guías alimentarias, así como otros aspectos nutricionales de su uso en alimentos y bebidas. Además, se destacaron el papel esencial que desempeñan unos profesionales de la salud bien informados y la necesidad de una educación de los consumidores con base científica. El presente artículo de la ISA presenta un breve resumen de las conclusiones clave que alcanzó este panel de expertos internacionales en la reunión del Consenso Iberoamericano.
La seguridad de los edulcorantes bajos en calorías está perfectamente establecida
Los edulcorantes bajos en calorías se encuentran entre los aditivos alimentarios más investigados del mercado. La seguridad de los edulcorantes bajos en calorías ha sido evaluada y confirmada en repetidas ocasiones por organismos científicos y regulatorios de todo el mundo, entre los que se incluyen el Comité de Expertos conjunto de la Organización para la Agricultura y la Alimentación / Organización Mundial de la Salud (FAO/OMS) sobre Aditivos alimenticios (JECFA), la Administración de Alimentos y Medicinas de Estados Unidos (FDA) y la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA). De hecho, su seguridad está volviendo a evaluarse continuamente para tomar en consideración datos de ingesta y seguridad científica nuevos y relevantes. El presente documento de Consenso aporta información sobre la evaluación de seguridad y los procesos de aprobación de los organismos regulatorios a nivel europeo e internacional, así como por las autoridades regulatorias nacionales de distintos países de Latinoamérica.
Beneficios de los edulcorantes bajos en calorías cuando se utilizan en lugar del azúcar
Partiendo de la literatura científica disponible, los expertos llegaron a la conclusión de que el uso de edulcorantes bajos en calorías en sustitución del azúcar en los programas de reducción de peso pudiera favorecer una pérdida sostenible o el mantenimiento de las pérdidas de peso. Estos programas deberían contar con planes dietéticos estructurados, posiblemente supervisados por profesionales de la salud, así como un estilo de vida activo y saludable que incluya una alimentación equilibrada y razonable y actividad física habitual. El consumo a voluntad de edulcorantes bajos en calorías, sin que sea como sustitución del azúcar, no parece tener efectos ni beneficiosos ni perjudiciales sobre el peso corporal. Además, el uso de edulcorantes bajos en calorías en programas de control de la diabetes pudiera contribuir a un mejor control glucémico. A diferencia del azúcar, los edulcorantes bajos en calorías no repercuten sobre la glucemia y, por consiguiente, no causan aumentos bruscos en los niveles de glucosa en sangre tras su consumo. Asimismo, los edulcorantes bajos en calorías aportan beneficios para la salud dental cuando se utilizan en lugar de los azúcares libres.
Los edulcorantes bajos en calorías como alternativa al azúcar en pautas dietéticas y recomendaciones nutricionales
Se ha propuesto que se incluyanalimentos y bebidas con edulcorantes bajos en calorías en las guías alimentarias como alternativas a los productos que emplean azúcares libres, y que esto podría fomentar la reformulación de productos por parte de la industria alimenticia y ayudar a lograr una reducción en el consumo de azúcar en toda la población. Por ejemplo, las recomendaciones dietéticas de varios países hacen referencia a alimentos y bebidas que contienen edulcorantes bajos en calorías como posibles alternativas a productos que emplean edulcorantes calóricos para promover la reducción del consumo de azúcares libres, con cierto asesoramiento sobre las cantidades de dichas bebidas (Bélgica, España, Reino Unido). Los alimentos y bebidas que contienen edulcorantes bajos en calorías pueden recomendarse también en sustitución de productos con azúcares añadidos para pacientes con diabetes, dislipidemia, obesidad o enfermedades cardiovasculares.
La educación de los consumidores debe potenciarse y ser científicamente precisa
Los consumidores a menudo tienen a su disposición múltiples fuentes de información sobre aspectos relacionados con la alimentación y la salud, y los datos que se presentan no siempre son fiables y de calidad. Además, el uso cada vez más frecuente de las nuevas tecnologías y de redes sociales favorece la rápida diseminación e intercambio de información, que no siempre es exacta. La educación de los consumidores sobre el uso de edulcorantes bajos en calorías, tal como ocurre con todos los temas relacionados con la salud y la nutrición, debería ser objetiva y basarse en la evidencia científica más robusta. También es básica la formación continua de los profesionales de la salud, dado que son una fuente esencial de información sobre aspectos relacionados con la alimentación y la salud tanto de la población general como de los pacientes. Por último, es fundamental que se facilite el acceso a información de calidad contrastada, sustentada en pruebas, transparente y fácil de entender por el público general que apoye las recomendaciones justificadas relativas al uso de edulcorantes bajos en calorías.
