Resultados del Ensayo Clínico Aleatorizado SWEET
Aspectos destacados:
- Un nuevo ensayo clínico de referencia que incorpora edulcorantes bajos/sin calorías en una dieta saludable y baja en azúcar puede ayudar a personas con sobrepeso u obesidad a mantener la pérdida de peso durante un año.
- El estudio también encontró cambios beneficiosos en la composición del microbiota intestinal, asociados con una mejora en la función metabólica, lo que podría ayudar a explicar el mejor mantenimiento del peso en el grupo que consumió edulcorantes, sin señales de disbiosis intestinal
- Los hallazgos contrastan la recomendación condicional de Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2023, que no aconseja el uso de edulcorantes no azucarados para el control del peso.
Los edulcorantes bajos/sin calorías han generado debate desde hace tiempo en la ciencia de la nutrición. ¿Son herramientas útiles para controlar el peso o dificultan la pérdida de peso? El reciente estudio SWEET publicado, uno de los ensayos clínicos más grandes y prolongados hasta la fecha, ofrece datos sólidos sobre como los edulcorantes bajos/sin calorías afectan el mantenimiento del peso, el microbiota intestinal y la salud cardiometabólica.
En el marco del studio SWEET
El proyecto SWEET es parte del programa e investigación Horizon 2020 de la Unión Europea, diseñado para investigar la seguridad y los efectos a largo plazo de los edulcorantes y potenciadores del sabor dulce. Como parte el proyecto, se llevó a cabo un ensayo clínico aleatorizado (ECA) de un año de duración para estudiar el impacto del uso de edulcorantes bajos/sin calorías en el control de peso, la microbiota intestinal y los marcadores de riesgo cardiometabólico en 341 adultos y 38 niños con sobrepeso u obesidad de Dinamarca, Grecia, España y Países Bajos.
En la primera fase, los adultos siguieron una dieta baja en energía durante ocho semanas y perdieron en promedio 10 kilogramos. Quienes lograron esta pérdida de peso pasaron a una fase de mantenimiento de peso de diez meses y fueron asignados aleatoriamente en dos grupos: el grupo con edulcorantes bajos/sin calorías , que reemplazo alimentos y bebidas ricos en azúcar por alternativas con edulcorantes como aspartame, sucralosa y estevia, dentro de una dieta saludable; y el grupo control que recibió instrucciones de evitar los edulcorantes bajos/sin calorías pero continuó con una dieta saludable baja en azúcar, con menos del 10% de la ingesta energética total proveniente de azúcares.
Los edulcorantes bajos o sin calorías pueden ayudar a mantener la pérdida de peso a largo plazo
Después de un año, ambos grupos mantuvieron más de la mitad de la pérdida de peso inicial, pero quienes utilizaron edulcorantes bajos/sin calorías lograron mejores resultados. El grupo de edulcorantes bajos/ sin calorías mantuvo en promedio una pérdida de 7.2 kg en comparación con 5.6 kg en grupo control, una diferencia de 1.6 kg a favor del grupo que consumió edulcorantes. Entre quienes mostraron mayor adherencia a la dieta, la diferencia alcanzó los 3.8 kg, lo que sugiere que la sustitución constante del azúcar por edulcorantes puede generar beneficios mayores.
Es importante destacar que los participantes del grupo de edulcorantes bajos/sin calorías redujeron su consumo de azúcar aproximadamente al doble que los grupo control, lo que confirma que los edulcorantes bajos/sin calorías utilizados como sustitutos de azúcar y no como fuentes adicionales de dulzor.
El grupo más pequeño de 38 niños también mostró mejoras en los puntajes de IMC- puntuación z- por edad en ambos grupos, aunque no se observaron diferencias significativas entre el grupo de edulcorantes bajos/sin calorías y el grupo control. Debido al tamaño reducido de la muestra infantil, estos resultados se consideran exploratorios.
Microbiota intestinal: una pieza clave el rompecabezas
El estudio también exploró cómo los edulcorantes afectan el microbiota intestinal en un subgrupo de 137 adultos. Los investigadores observaron cambios distintivos en la composición microbiana entre los grupos, con los participantes del grupo edulcorantes bajos/sin calorías mostrando una mayor abundancia de bacterias productoras de ácidos grasos de cadena corta, así como de taxones productores de metano. Estos cambios están asociados con una mejor regulación metabólica y podrían ayudar a explicar por qué el grupo con edulcorantes bajos/sin calorías mantuvo una mayor pérdida de peso durante el año.
No se detectaron señales de disbiosis ni patrones microbianos perjudiciales. De manera interesante, los investigadores encontraron que los perfiles de microbiota intestinal al inicio del estudio podían predecir qué individuos responderían mejor a la intervención, especialmente en términos de evitar el aumento de peso y cambios en los niveles de HbA1c. Este hallazgo sugiere que las bacterias intestinales podrían influir en cómo diferentes personas responden al uso de edulcorantes, lo que abre la puerta a enfoques dietéticos más personalizados.
Resultados cardiometabólicos
No se observaron diferencias significativas entre los grupos en los principales marcadores de diabetes como glucosa, insulina y HbA1c. A los seis meses, el grupo con edulcorantes bajos/sin calorías mostró reducciones en los niveles de colesterol total, LDL y HDL, aunque estos cambios no se mantuvieron a los 12 meses, probablemente debido a que menos participantes completaron el seguimiento completo.
Una importante estudio europeo desafía la guía de la OMS sobre edulcorantes no azucarados
Los hallazgos, publicados en Nature Metabolism en octubre de 2025, difieren significativamente con la recomendación condicional emitida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2023, que sugiere evitar el uso de edulcorantes no azucarados para el control del peso. A diferencia de la evidencia observacional de baja certeza que fundamentó la guía de la OMS, el ensayo SWEET de un año demostró que incorporar edulcorantes bajos/sin calorías en una dieta saludable y baja en azúcar favorece el mantenimiento de la pérdida de peso y genera cambios positivos en la microbiota intestinal, sin efectos adversos sobre la salud cardiometabólica.
Implicaciones para la salud y las políticas publicas
El proyecto SWEET aporta una de las evidencias más sólidas hasta ahora de que los edulcorantes bajos/sin calorías pueden apoyar de manera segura el manejo del peso a largo plazo como parte de una dieta equilibrada y baja en azúcar. Al demostrar una pérdida de peso sostenida, beneficios en la microbiota intestinal y ausencia de efectos adversos sobre la salud cardiometabólica, el estudio desafía las preocupaciones persistentes derivadas de estudios observacionales y debates en políticas públicas.
En un comentario, la Dra. Sarah Schmitz y el Dr. Louis Aronne destacaron la importancia de los hallazgos del ensayo al abordar uno de los mayores desafíos en el manejo de la obesidad: mantener la pérdida de peso a largo plazo. Al incluir una amplia variedad de alimentos y bebidas reales que contienen edulcorantes, y al reclutar participantes de varios países europeos, el estudio SWEET refleja mejor los patrones de consumo cotidianos y mejora la aplicabilidad de sus resultados en distintos contextos dietéticos y culturales.
En conjunto con investigaciones clínicas previas, estos hallazgos refuerzan el conjunto general de evidencia que indica que los edulcorantes bajos/sin calorías pueden ser una herramienta valiosa para la reducción de azúcar y el manejo del peso a largo plazo, cuando se utilizan como sustitutos del azúcar añadido dentro de una dieta saludable.