Bruselas, 9 de octubre de 2025: la Asociación Internacional de Edulcorantes (ISA) desea señalar las limitaciones del estudio observacional presentado en la Semana de Gastroenterología Europea (UEG Week) 2025, que informó sobre una posible asociación entre el consumo de bebidas con edulcorantes bajos o sin calorías y la enfermedad hepática.
Si bien los estudios observacionales pueden identificar las tendencias a nivel poblacional, no pueden establecer relaciones de causalidad.
Es importante destacar que muchas personas suelen optar por consumir bebidas con edulcorantes bajos o sin calorías debido a condiciones de salud preexistentes, como obesidad, diabetes u otros trastornos metabólicos, todos ellos factores de riesgo conocidos de enfermedad hepática. Este fenómeno, conocido como causalidad inversa, sugiere que las observaciones realizadas podrían reflejar problemas de salud subyacentes más que un efecto directo de las bebidas endulzadas con edulcorantes bajos o sin calorías.
La evidencia sólida proveniente de revisiones sistemáticas de ensayos clínicos aleatorizados (ECA), considerados el estándar de oro en la ciencia de la nutrición, ofrece una perspectiva más clara. Estos estudios muestran que reemplazar las bebidas azucaradas por alternativas endulzadas con edulcorantes bajos o sin calorías puede reducir la grasa hepática, el peso y la grasa corporales (McGlynn et al., 2022). Esta evidencia causal más sólida no respalda la plausibilidad biológica de las asociaciones perjudiciales reportadas en el estudio presentado durante la UEG Week 2025.
Como parte de una dieta equilibrada y un estilo de vida saludable, los edulcorantes bajos o sin calorías pueden contribuir al cumplimiento de los objetivos de salud pública orientados a reducir el consumo de azúcar y, en última instancia, ayudar en el control del peso, la diabetes y la salud dental.